miércoles, 5 de septiembre de 2012

Grilletes contra el vuelo


Sentado sobre el marco de la ventana, como cada mañana, contemplaba el amanecer tras las casas de la ciudad. A pesar de lo repetitivo del suceso, a sus ojos un amanecer nunca era igual que otro. Le fascinaban, su mirada se perdía más allá de las nubes anaranjadas, tratando de imaginar qué habría al otro lado. A menudo soñaba con volar, más allá de los grilletes y los muros, más allá incluso de las nubes y el alba, saludar a la mañana desde lo alto, como las aves. Sin embargo, su sino era aquella prisión de arena donde todo se pudre por dentro.
Dirigió la mirada a sus extraños brazaletes, colocados desde hace años en torno a sus muñecas. A ojos de cualquiera podrían parecer pulseras poco ostentosas, llenas de grabados y símbolos que a simple vista pasaban desapercibidos.
Se encontraba recostado cuando un pájaro pequeño, del tamaño de un ruiseñor pero con los colores vivos del cielo, se posó sobre su vientre. El roce de las diminutas patas del ave sobre la piel desnuda le hizo sonreír, como si el animalito le hubiera hecho cosquillas.

-        -  Buenos días – pasó el dedo índice con suavidad sobre la cabecita emplumada y el pájaro cerró los ojos – Es temprano – y asintió como si comprendiera el silencio del animal – Lo sé, para mí también lo es, pero me gusta ver esto – añadió señalando hacia afuera con la mirada

Pasó un rato en compañía del animal, acariciándole el plumaje despreocupadamente, hasta que un par de golpes en la puerta interrumpieron su paz.

-       -  Márchate, tú que puedes – susurró al pájaro poniéndole la nariz en la cabecita mientras, a su vez, el ave emitía un leve y dulce silbido. Luego, la dejó volar hasta perderla de vista.

De nuevo, dos golpes en la puerta. Casi los había olvidado, al igual que su encierro, pero la voz de quien le aguardaba fuera se aseguró de recordárselo:

-       -   Khalid, tenéis trabajo. Preparáos.

3 comentarios:

  1. Momentos que dan el aliento de vida, y hacer de ese lugar algo más claro

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  2. ¿Soy yo o últimamente en Metáfora solo hay prisiones, celdas, barrotes y torturas? ¿Se habrán dado cuenta los poderosos de que los finales felices no son para ellos y en venganza se dedican a encerrarnos a todos? ¿O simplemente quieren darnos emociones antes del final de nuestros "y comieron perdices? Mmm...bah, estarán amargados.

    En cualquier caso, Khalid, pueden aprisionar tu cuerpo, pero nunca tu imaginación: lo que nunca pasó nunca puede envejecer ¿no?- Eddy

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  3. A veces las cosas más simples encienrran las verdaderamente hermosas, aveces un simple aleteo, descubre demasiadas respuestas...

    ... Supongo

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