lunes, 27 de mayo de 2013

Ríos oscuros


En mis manos corren ríos, ríos espesos y oscuros, que escapan gota a gota, se pierden entre sombras, ondulan, vibran... En mis manos hay ríos rojos que trepan a tientas, como venas que se extienden, trazan hebras en mi pecho, me atenazan el corazón... ¿Se irá alguna vez esta sensación? me pregunto, pero sé que el tiempo solo mitigará el dolor... jamás lo hará desaparecer.

Intento recordar su sonrisa, pero solo veo sus labios húmedos y oscuros, su mano inerte... ¿Existe algo más descorazonador que la impotencia?¿Algo más cruel  que la certeza de que podrías haber hecho algo más?

Las puertas se abren. Noto todas las miradas fijas en mí, pero por algún motivo esta vez no tengo miedo. Camino despacio para que vean la sangre, su sangre. Quiero que todos sepan lo que ha pasado, que el culpable vea bien lo que ha hecho. Algo bulle en mis tripas, me hace arder desde dentro... ira, identifico, tal vez por primera vez en mi vida siento ira.